En varios pisos sobre una dulcería de Dr. Olvera en la colonia Obrera tenemos el Museo del Juguete Antiguo Mexico, iniciativa de Roberto Shimizu un arquitecto japonés que felizmente no se convirtió en un acumulador y desde 2006 nos comparte su enorme e impecable colección de pedacitos de la vida cotidiana de los mexicanos del siglo XX.
Decenas de vitrinas muestran miles de objetos singulares como una suerte de gabinete de curiosidades del siglo XXI, que maravillan a los visitantes, quienes van descubriendo recuerdos de tiempos pasados entre vitrinas a modo de caleidoscopios y estantes que son en sí mismos pequeñas obras de arte. Las personas exclaman: ¡yo tuve ese! y ¡ese también! o ¡ahhh ese no me lo compraron!
La colección expuesta en cinco salas abarca desde los últimos años del siglo XIX, hasta la década de los 90's cuando el Tratado de Libre Comercio y las crisis económicas recurrentes condenaron al olvido a las marcas productoras de juguetes nacionales como Lili Ledy y Exin México.
Se pueden ver muñecas, hombres de acción, miniaturas, armables, juegos de mesa, cochecitos, trenecitos, transportes de parques, entre miles y miles de objetos que nos cuentan cómo era la vida en México, se antoja, sin duda, construir la biografía cultural de estos juguetes y su proceso de singularización desde un producto mercantil condenado a terminar en la basura en manos de un niño, hasta su existencia en un museo como objeto casi sacralizado.* Todo un festín para el historiador cultural como yo, interesado en el siglo XX y su vida cotidiana; pues los juguetes se activan como una recreación de la realidad que divierte y prepara a los niños y niñas para los roles que ocuparán en la sociedad. Así vemos pequeñas gasolinerías Pemex, juegos de té, vajillitas, artículos domésticos, y hasta juegos de pulquería, sin duda reflejo del modo de pensar de quienes los jugaban.
El Museo es una iniciativa de particulares, y se nota, pues no existe la pedantería institucional y es un placer visitarlo, como reencontrarse con viejos amigos que uno tenía olvidados en un rincón. Abre todos los días, incluso los lunes de 9 a 6, sábado y domingo hasta las dos de la tarde.
Además cada mes organizan encuentros de coleccionistas donde puedes comprar y vender además de juguetes, objetos antiguos. Anden, yo se que les dio curiosidad, vayan pronto, mientras, visiten su blog para checar los próximos eventos: Museo del Juguete y en @MuseodelJuguete
*Igor Kopytoff, "La biografía cultural de las cosas. La mercantilización como proceso", en Arjun Appadurai, ed. La Vida social de las cosas, México, Los Noventas, Conaculta, Grijalbo, 1991, pp. 89-121